
Diálogos por el agua en Catamarca
La escasez de agua para la vida en la Cuenca del Salar del Pipanaco, Catamarca es preocupante. En este territorio se debaten las políticas públicas de agua entre los pueblos y las corporaciones.
En Tierra Nativa comprendemos la justicia de género como un eje que necesariamente atraviesa nuestro hacer, dado que no es posible concebir una sociedad justa sin erradicar el patriarcado que ha sido sostenido y retroalimentado por el sistema capitalista actual.
En un contexto de profunda crisis económica, financiera y ambiental, los países ricos y las grandes corporaciones financieras imponen políticas de ajuste, explotación de territorios y apropiación de bienes comunes que profundizarán las desigualdades entre el norte y el sur global. En este contexto, son las mujeres racializadas, indígenas, campesinas, afrodescendientes y migrantes quienes se encuentran en la franja de mayor vulneración económica y social.
El sistema capitalista hegemónico, patriarcal, colonial y ecocida funciona erigido sobre la explotación de una masa de mujeres en condiciones de precarización laboral e invisibilización de trabajo doméstico y de cuidado. La división sexual del trabajo constituye la base fundamental de la opresión hacia las mujeres, lesbianas, trans, travestis y demás identidades disidentes.
Así como es imposible sostener la vida sin naturaleza, tampoco es posible hacerlo sin la enorme cantidad de trabajo que implica la reproducción de la vida. Sin embargo, el mismo sistema que pretende anular el vínculo ontológico entre las personas y la naturaleza, niega e invisibiliza el rol fundamental que las mujeres han ocupado -a fuerza de imposiciones patriarcales- como productoras y cuidadoras de vida.
Sin embargo, son las mujeres quienes han desarrollado históricamente un rol fundamental en la defensa de los territorios dado que al ser colocadas en el rol de “reproductoras y cuidadoras”, han logrado capitalizar una serie de aprendizajes y conocimientos que han servido para proteger el medio que posibilita el desarrollo de la vida.
Tierra Nativa cuestiona la brecha existente entre cultura y naturaleza, el concepto mercantilista del trabajo, la apropiación de cuerpos y territorios y la división sexual del trabajo. Trabajamos por el reconocimiento de la autonomía y autodeterminación de las mujeres, los pueblos, los cuerpos y los territorios, comprendiendo que una sociedad más justa y equitativa no será posible sin el desmoronamiento del patriarcado.
La escasez de agua para la vida en la Cuenca del Salar del Pipanaco, Catamarca es preocupante. En este territorio se debaten las políticas públicas de agua entre los pueblos y las corporaciones.
Porque no hay justicia ambiental sin justicia de género, nos sumamos a los esfuerzos por desmantelar el patriarcado, haciendo de nuestra organización un espacio donde todes puedan participar en plenitud.
Las mujeres debemos jugar un papel fundamental en definir y decidir sobre las características del proceso de transición y el nuevo sistema energético que queremos construir.
La pandemia de Covid-19 está haciendo estragos en el mundo, agravando las crisis sanitarias, económicas y sociales existentes. Sus impactos desiguales se ven exacerbados por el apartheid de las vacunas, perpetuado por los países ricos, los mismos que crearon la crisis climática y que ahora huyen de su responsabilidad histórica.